Si por algo es conocida Galicia es por la calidad de sus productos y por supuesto entre todos sobresale el marisco.
Nunca está de mas recordar como se prepara un buen marisco. Si tenemos buena materia prima como es el caso del Marisco de Galicia, debemos tener en cuenta tres aspectos básicos para su preparación.
Si el marisco está vivo hay que meterlo cuando el agua está fría. Si están vivos y los metemos en agua hirviendo los mariscos intentarían salir de la olla y podrían perder sus patas. Con los langostinos, camarones y percebes no tenemos este problema, así que siempre los meteremos una vez rompa a hervir el agua.
Si el marisco está muerto hay que meterlo cuando el agua está hirviendo. Si se mete el marisco muerto en agua fria, debido al tiempo que va a estar en el agua hasta su cocción, igualmente podría causar la pérdida de las patas, por eso hay que meterlo después de que rompa a hervir.